Fajas para cuidar la espalda y mejorar la postura
En la actualidad el uso de las fajas ha sido dinámico y gracias a los avances en su tecnología de aplicación, se han ido incrementando las maneras y las especificaciones en las que pueden ayudarle a una persona, como por ejemplo el surgir de las fajas para cuidar la espalda.
Este tipo de fajas para cuidar la espalda ha tomado fuerza en los últimos años debido a los constantes problemas lumbares que sufre la gente por diferentes razones, como malas posturas y esfuerzos mal realizados que pasan factura con los días y se convierten en molestos dolores.
En muchas ocasiones, las fajas para cuidar la espalda se emplean como tratamiento complementario a terapias y medicina para aliviar el dolor causado muchas veces por inflamación, lo que provoca lesiones lumbares como el lumbago o problemas de columna. Además, las fajas para cuidar la columna ayudan a recuperar movilidad y alivian el dolor.
Sin embargo, es necesario hablar sobre qué es una faja para cuidar la espalda, que se convierte en una ayuda de soportes y órtesis que tiene como objetivo contener la zona lumbar y la región sacra de la espalda.
Habitualmente, las fajas para cuidar la columna son utilizadas por pacientes con dolores crónicos o dolores lumbares, quienes ven en este tipo de prenda una forma para mejorar la estabilidad de la espalda, aportando seguridad en los movimientos.
Cabe resaltar que el uso de las fajas para cuidar la espalda debe estar supervisado por un especialista para evitar otro tipo de lesiones más graves.
El objetivo de las fajas para cuidar la columna es, principalmente, la contención de la zona y la relajación de toda la musculatura de la espalda. Además, sirve para evitar que quien la use, realice movimientos que empeoren la lesión. Así, cumple con la función principal de aliviar el dolor, haciendo que el paciente realice sus actividades cotidianas.
Por lo general, los casos en los que se recomiendan las fajas para cuidar la espalda son en casos de lumbalgia aguda, en los que el dolor no desaparece muy fácilmente y resulta incapacitante para el paciente, pues la molestia le impide realizar actividades cotidianas. También en caso de lesiones crónicas que afectan la calidad de vida de quien las usa, ya que el uso de las fajas para cuidar la espalda aportará seguridad en los movimientos.
Además, las fajas para cuidar la columna también se recomiendan en el caso de deportistas que levantan grandes cantidades de peso de forma regular, ya que las fajas para cuidar la espalda ayudan a la contención de la zona y, por tanto, a prevenir las lesiones.
Fajas para la espalda
No obstante, existen varios tipos de fajas para cuidar la espalda que se adaptarán a las necesidades de cada quien.
El primer tipo son las clásicas fajas para cuidar la columna, que suelen ser de materiales como el neopreno y se utilizan para tratar lumbalgias, hernias o dolores agudos en la espalda baja.
El segundo tipo son las fajas deportivas que son especialmente indicadas para la realización del deporte o las actividades de musculación. Estas fajas para cuidar la espalda suelen estar confeccionadas en materiales transpirables e incluyen un refuerzo de sujeción.
Este tipo de fajas reforzadas suelen emplearse en procesos postoperatorios de cirugía de espalda, en casos particulares como una cirugía de hernia discal lumbar, cervical o una artrodesis lumbar, ya que sirven para mantener la espalda en una posición adecuada.
El tercer tipo son las fajas postparto, que son empleadas tras haber dado a luz. En este caso, las fajas para cuidar la espalda cubren toda la zona abdominal y su objetivo es que la zona recupere firmeza.
Un caso aparte en fajas para cuidar de la espalda son las que se utilizan para el trabajo, siendo recomendadas para evitar ciertas lesiones de espalda, sobre todo en puestos donde se debe levantar cargas de forma continua. Con el uso de la faja control de abdomen y levanta de cola Ref. 0-010, además del cuidado de la columna, se protege la zona del abdomen inferior
Beneficios
En diferentes casos mencionados, el uso de una faja para cuidar la espalda puede aportar muchos beneficios al paciente, ya que puede aliviar el dolor de forma considerable y mejorar la movilidad y el funcionamiento de la espalda.
Asimismo, las fajas para cuidar la espalda aportan seguridad y firmeza en los movimientos, ya que, quien la use, al notar la zona comprimida, siente mucha más confianza para desplazarse y hacer algún esfuerzo. Por otro lado, también sirve para relajar la musculatura, lo que puede ayudar a evitar lesiones y sobrecargas en otras zonas del cuerpo.
No obstante, el uso de las fajas para cuidar la columna no debe sobrepasarse, pues puede acarrear diferentes contraindicaciones que deben tenerse en cuenta.
Una de las recomendaciones es no utilizar las fajas para cuidar la espalda de forma constante, ya que la musculatura de la espalda se podría acostumbrar a la contención en la que permanece, y, por ende, podrían alterarse sus funciones.
Por otra parte, el uso excesivo de las fajas para cuidar la espalda puede aumentar la presión arterial, por ende, no son recomendables para pacientes con problemas cardiovasculares o con patologías cardíacas.
Además, las fajas para cuidar la columna pueden aportar una sensación de ‘falsa seguridad’ y hacer que el paciente se confíe, llegando a extralimitarse en sus funciones y movimientos que fuercen la espalda. Por lo que es recomendable que el uso de las fajas para cuidar la espalda vaya acompañado de tratamientos alternativos, como fisioterapia.
En resumen, es importante mantener una zona lumbar sana ya que es una de las partes del cuerpo que más sufre con las diferentes posturas o los esfuerzos que se realicen, y como recomendación para prevenir al máximo los problemas lumbares, es importante evitar el uso de ropa ajustada y limitar el uso de zapatos de tacón para ocasiones puntuales. Además de mantener un peso adecuado para evitar tensiones en la zona.
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